Pautas de crianza

- Educa a tus hijos con un poco de hambre y un poco de frío-

-Confucio-



Dentro de la familia es deseable que todo funcione en armonía; cada actividad que se realice sea basada en complementariedad, cada miembro de familia tiene un deber ser y un que hacer. Por eso es muy funcional, práctico y sano que existan pautas de crianza que  permitan llevar el día a día  como padres sabiendo que esperar de los hijos y los hijos que esperar de los padres.

Cada núcleo familiar establece horarios, rutinas y actividades de acuerdo a su estilo de vida,así cada familia funciona como un sistema único e inimitable.

A continuación señalo estrategias o herramientas que considero importantes a la hora de criar hijos independientemente del modelo familiar.

Antes de establecer unas pautas de crianza, tómese su tiempo analice con su pareja qué es realmente lo que ustedes esperan de su hijo(s) ? y  cómo  desean que funcione la familia?

Los padres deben hablar un mismo idioma, es decir; llegar acuerdos antes de establecer  PAUTAS DE CRIANZA.

• Comuníquese con AMOR
• Establezca convenios con su hijos.
• Aprenda a decir NO!!! y  a mantenerce ...
• Cuíde la relación con su hijo (s). Respételo con sus palabras y sus acciones.
• El castigo debe ir dirigido a la conducta ( al hacer ) y no al ser ( el menor).
• El apoyo entre las figuras de autoridad debe ser constante.
• Sea respetuoso, firme y amoroso
• Escuche a su hijo, entiéndalo y  apóyelo.
• Sin perder su posición jerárquica,sea amigo de sus hijos
• Enséñele al menor a ser asertivo, generando espacios de comunicación.
• Establezca rutinas para cada actividad que se realice al interior de la familia.Ejemplo.La hora de comer, la hora de ir a la cama, tiempo para ver televisión.

Y  POR ULTIMO GÓCESE LA CRIANZA... MUCHA SUERTE !!!

Carta de un hijo a un padre

Queridos lectores encontré grandes verdades en el siguiente texto. Espero lo disfruten, analicen y aprendan cantidades.

          Carta de un hijo a su padre

No me des todo lo que te pida, a veces sólo pido para ver hasta cuánto puedo tomar.

No me grites, te respeto menos cuando lo haces, y me enseñas a gritar a mí también, y yo no quiero hacerlo.

No des siempre órdenes... Si en vez de órdenes, a veces, me pidieras las cosas, yo lo haría más rápido y con más gusto.

Cumple las promesas, buenas o malas... Si me prometes un premio dámelo, pero también si es castigo.

No me compares con nadie, especialmente con mis hermanos. Si tú me haces lucir mejor que los demás, alguien va a sufrir, y si me haces lucir peor que los demás seré yo quien sufra.

No cambies de opinión tan a menudo sobre lo que debo hacer, decídete y mantén esta decisión.

Déjame valerme por mí mismo, sí tu haces todo por mí, yo nunca podré aprender.

No digas mentiras delante de mí ni me pidas que las diga por ti, aunque sea para sacarte de un apuro, me harás sentir mal y perder la fe en lo que me dices.

Cuando yo haga algo malo, no me exijas que te diga por qué lo hice, a veces ni yo mismo lo sé.

Cuando estés equivocado en algo, admítelo. Crecerá la opinión que yo tengo de ti y me enseñarás a admitir mis equivocaciones también.

No me digas que haga una cosa que tú tu no haces, yo aprenderé y haré siempre lo que tú hagas, aunque no lo digas, pero nunca haré lo que tú digas y no hagas.

Enséñame a amar y conocer a Dios. No importa si en el colegio me quieren enseñar porque de nada vale si yo veo que tú ni conoces ni amas a Dios.

Cuando te cuente un problema mío no me digas: no tengo tiempo para boberías o eso no tiene importancia. Trata de comprenderme y ayudarme.

Y quiéreme, y dímelo, a mí me gusta oírtelo decir, aunque tú no creas necesario decírmelo.

Tomado de www.laventanita.net